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Vivir con salud: Día Internacional de la Salud de la mujer: mujer cuidadora, “cuídate como lo haces con ellos”
2007/05/31 09:10 | -k bidalia webmaster2 | Esteka iraunkorrak | Salud y MujerFuente: J. RESYM (obsym.org)
La revisión de los textos escolares indica que aún hay carencias en el uso del lenguaje y faltan personajes femeninos
El cuidado de las personas dependientes, enfermos y familiares tiene nombre femenino. La mujer, por lo general es la cuidadora, lo ha sido siempre y el rol parece mantenerse. El 90% de las mujeres vive con la persona atendida y el cuidado es diario e intensivo. Ese cuidado aumenta el riesgo de enfermedades y trastornos en la mujer, como depresión, estrés, trastornos del sueño, fatiga..., y aún así no recurre a los servicios de salud para ella como lo haría con la persona o personas de las que es cuidadora, madre o familiar.
Las campañas de salud de la mujer y diversos colectivos insisten en el cuidado y atención de la mujer consigo misma. También llaman la atención en la diferencia de género en cuanto a salud, tanto en investigación, como en recursos y servicios.
Las enfermedades cardiovasculares, a pesar de ser la principal causa de mortalidad en hombres y mujeres, no afectan por igual a ambos sexos, ni responden por igual a los tratamientos, porque hay diferencias biológicas, el infarto es más frecuente en el hombre, el ictus en la mujer... Y es que la mayoría de los estudios se han hecho entre hombres, al igual que en otras patologías muy frecuentes, como la obesidad, diabetes, salud mental, incluso cáncer.
Diversas campañas han contribuido a mejorar la salud de la mujer, y a prevenir enfermedades, que de diagnosticarse en estadíos avanzados, pondrían en peligro su vida. Esas campañas con revisiones ginecológicas han contribuido a detectar a tiempo enfermedades graves, como los cánceres ginecológicos, sobre todo el de mama. Un 64% de las españolas dice que la enfermedad que más teme es el cáncer, según el Estudio sobre la Percepción del Cáncer en España, de la Sociedad Española de Oncología Médica.
A partir de los 18 años
Primera visita al ginecólogo a partir de los 18 años, o cuando se comienza con las relaciones sexuales, y siempre que se observen síntomas relacionados con una menstruación irregular, dolores abdominales frecuentes..., puede haber posibilidad de endometriosis. La visita ginecológica se completa con una citología, análisis hormonal y exploración. Las sucesivas visitas las irá marcando el médico.
No hay que infravalorar cualquier síntomas o trastorno, sino consultarlos, como la depresión, trastornos de alimentación, migraña, problemas digestivos...
A partir de los 30 años
Continuar con las pruebas ginecológicas y realizar un autoexamen periódico de la mama. Si se observa alguna anomalía (bultos, cambios de aspecto en la piel...) acudir cuanto antes al especialista. Recordar que los anticonceptivos y el tabaco están contraindicados, aumentan el riesgo de ictus.
Aparecen con mayor frecuencia los fibromas (tumores no cancerosos en la pared del útero)
Los embarazos a esta edad deben tener un mayor cuidado, debería realizarse un diagnóstico prenatal para conocer el riesgo de síndrome de Down o de otras anomalías cromosómicas.
Es importante que a partir de esta edad se controlen los niveles de colesterol, ácido úrico, glucosa y la tensión arterial.
La dieta equilibrada y el ejercicio contribuirán a evitar la obesidad ?y las enfermedades cardiovasculares-, y también enfermedades musculoesquelética (osteoporosis, artrosis...), puesto que mejora la musculatura.
A partir de los 40 años
A partir de esta edad, una mamografía cada uno o dos años y citología todos los años, sin olvidar todos los controles cardiovasculares, como niveles de colesterol, hipertensión, glucosa...
Vigilar más aquellas enfermedades de las que hay antecedentes familiares como cánceres de mama, colon..., o enfermedades cardiovasculares, infartos, ictus...
Algunas enfermedades reumáticas, como artritis reumatoide, artritis psoriásica, espondilitis... aparecen en personas jóvenes. Síntomas a tener en cuenta: dolor e inflamación articular por las mañanas, rigidez de la columna... Se requiere también una mayor vigilancia del aparato reproductor para descartar tumores. Podrían aparecer episodios de pérdida de orina, que son motivo de consulta y hay tratamientos.
Problemas relacionados con el peso, o falta de nutrientes (vitaminas, minerales) requeriría una visita al endocrinólogo.
A partir de los 50
A partir de esta edad, incluso antes, algunas mujeres ya tienen los primeros síntomas de la premenopausia, que pueden ser tratados. A partir de ahora se puede perder entre un 3 y un 5% de masa ósea debido a la reducción de los niveles de estrógeno, por lo que sería importante hacer una densitometría para ver el riesgo de osteoporosis.
Continuar con los controles ginecológicos, con mayor vigilancia de las mamas y del aparato reproductor (sequedad vaginal, pérdida de orina, sangrado...) Vigilar también la dieta, hay un aumento de peso, entre 5 y 10 kilos en los años previos a la menopausia. Vigilar los nutrientes necesarios, y un mayor aporte de vitaminas y antioxidantes.
La piel necesita más cuidados, más hidratación. Comienzan a aparecer los lentigos (manchas en la cara y en el dorso de las manos.
La salud bucal es fundamental para mantener las piezas dentales y su correcta función; al igual que la vista, la mayoría, a esta edad, ya tiene presbicia.