A lo largo del programa científico de la "III Jornada del Observatorio de Salud y Mujer", celebrada en Barcelona, la profesora Marie McCormick, del Departamento de Sociedad, Desarrollo Humano y Salud de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard, presentó los resultados de diferentes estudios relacionados con los servicios de salud, la mortalidad infantil y las estrategias en la atención de recién nacidos de alto riesgo. En la actualidad, McCormick estudia los factores de riesgo de depresión en madres de bebés prematuros.

Sobre este particular, la experta aseguró que los nuevos modelos de intervención llevados a cabo en los centros hospitalarios a familias de niños de muy bajo peso al nacer permiten reducir significativamente el estrés y la depresión materna. McCormick confirmó la importancia que tiene, en el cuidado del neonato internado de alto riesgo, la participación de grupos multidisciplinares y animó a los asistentes a implementar estrategias tendientes a mejorar la atención emocional de los padres y la integración del niño en su familia.

Las jornadas también sirvieron para recordar a los asistentes que la salud reproductiva y sexual es una condición de bienestar físico, mental y social en aspectos relativos al sistema reproductivo en todas las etapas de la vida, según lo define la Organización Mundial de la Salud, que dicta que la salud reproductiva implica que las personas puedan tener una vida sexual satisfactoria y segura, la capacidad de tener hijos y la libertad de decidir si quieren tenerlos, cuándo y con qué frecuencia. Los expertos subrayaron que, en esta última condición, está implícito el derecho de hombres y mujeres de estar informados y tener acceso a métodos de regulación de la fertilidad que sean seguros y de su preferencia, eficaces, asequibles y aceptables, señalando igualmente el derecho a acceder a servicios de salud adecuados que permitan a la mujer llevar a término su embarazo de forma segura.

Los organizadores de la jornada también señalaron que desarrollar un plan de salud integral de la mujer implica atención prenatal, en el parto y al neonato, y un seguimiento que asegure el bienestar de madre e hijo.

En este sentido, subrayaron que los principales objetivos del Observatorio son intentar describir la situación actual de la salud reproductiva y sexual en Cataluña, difundir nuevas iniciativas en la atención materno-infantil y en la salud sexual y reproductiva, proponer recomendaciones que refuercen la participación de la mujer en el proceso de su cuidado y atención, y presentar iniciativas en el ámbito de la educación y la promoción para la salud de la mujer.